Oh, glorioso apóstol San Judas Tadeo, santo poderoso y lleno de misericordia,
Tú que nunca dejas sin respuesta a los que claman a ti en su desesperación, Tú, protector de los más necesitados, refugio de los afligidos, intercesor de los desvalidos. Hoy nos postramos ante tu santa imagen, con corazones llenos de esperanza y fe inquebrantable, para rogar por la salud de los recién nacidos.
San Judas Tadeo,Tú que conoces la fragilidad de la infancia y la delicadeza de los pequeños,te pedimos con toda nuestra alma que cuides y protejas a estos seres inocentes. Que tu bondad infinita los rodee con su manto de amor, y les concedas una salud vigorosa, un crecimiento sano y una vida llena de alegría. Que sus pequeños cuerpecitos sean fuertes y sanos, y que cada aliento que tomen sea un testimonio de tu providencia divina. Que el dolor y la enfermedad se alejen de ellos, y que la paz y la armonía los acompañen en cada etapa de su desarrollo.
Te suplicamos, san Judas, que con tu poderosa intersección alivies las angustias de las madres y familias en este tiempo de gran preocupación. Ilumina a los médicos, las enfermeras, y a todos los que están en contacto con ellos. Que todos actúen con sabiduría y compasión,guiados por la mano de Dios. Que se realice el milagro de la salud en cada uno de ellos.
Por tu divina intersección San Judas, Amén.
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