Oh, glorioso apóstol San Judas Tadeo, santo poderoso y lleno de misericordia, amparo de los que claman en su desesperación, Tú que nunca dejas sin respuesta a los que claman a ti en su aflicción.
San Judas Tadeo, tú que comprendes la fragilidad del alma y la complejidad de los lazos familiares, tú que sabes de las heridas profundas que lastiman y la dificultad de la reconciliación. Te suplico, con el corazón encogido por esta tormenta familiar, que dirijas tu mirada compasiva hacia la necesidad que nos aqueja.
Mira,oh Santo,la fragilidad de nuestra familia,las fisuras que amenazan con separarla en pedazos. Te ruego que, con tu poderosa intersección, restablezcas la confianza y el amor. Ilumina nuestros corazones, guía nuestras palabras y acciones, para que encontremos el camino de la comprensión y la reconciliación. Que la verdad y la justicia prevalezcan en nuestra familia, y que el perdón sea la piedra angular de nuestra reconstrucción. Te suplicamos por la fortaleza interior, el diálogo honesto y el amor que ha de sanar nuestras heridas, devolver el entendimiento y reparar el tejido familiar.
Te prometo mantener vivo tu recuerdo en nuestro hogar, compartiendo tu devoción con los nuestros y honrando tu gran poder intercesor.
Por tu divina intersección,San Judas,Amén.
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