oh, glorioso apóstol San Judas Tadeo, santo poderoso y lleno de misericordia,
Tú que nunca dejas sin respuesta a los que claman a ti en su desesperación,
Tú, defensor de los necesitados y guía en los momentos de oscuridad,
intercesor fiel ante el trono de la divinidad.
Hoy nos postramos ante tus pies, pidiendo tu poderosa intercesión
para la reconstrucción de nuestras comunidades, heridas por la injusticia y la división.
San Judas, patrono de los casos difíciles y desesperados,
contempla la necesidad de sanación, de perdón y reconciliación que clama en nuestros corazones.
Te pedimos que ilumines el camino hacia la unidad y la justicia,
que des sabiduría y fortaleza a nuestros líderes y a todos los que desean construir puentes de entendimiento.
Que los corazones endurecidos se ablanden, que las diferencias se transformen en colaboración,
que la compasión y el amor sean el faro que guíe nuestros pasos.
Socórreme en esta tarea compleja de restaurar las comunidades
quebrantando las cadenas de la discriminación, la exclusión y el egoísmo.
Que se restaure la confianza entre nuestros hermanos,
el respeto sea el fundamento de nuestras relaciones y la paz reine en cada hogar.
te prometo honrar tu nombre con acciones concretas,
buscar justicia y difundir tu devoción entre los que me rodean.
Por tu divina intersección, San Judas, amén.
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